OpenAI tiene miedito. La IA no duerme, el humano tampoco. → AI IA HOY

GPT-5.2 acelera, Google aprieta, Disney cobra, el Pentágono apunta y los humanos… hacen scroll.

Dicen que no hay prisa, pero todo corre. OpenAI lanza GPT-5.2 con urgencia mal disimulada, mientras Google deja de tener miedo y empieza a mandar. Wall Street cambia de favorito, la ciberseguridad se convierte en un “ya avisaremos”, y la creatividad pasa oficialmente por el departamento legal. Entre pactos con Disney, guerras que ya se escriben con prompts y países convertidos en laboratorios educativos, el futuro llega rápido, caro y sin pedir permiso. Tranquilos, no es una distopía. Es un modelo de negocio.

Puntos clave

GPT-5.2 llega con trilogía incluida: Instant, Thinking y Pro. Más razonamiento, más empresa, menos romanticismo.
OpenAI corre porque Gemini pisa fuerte. Dos años para GPT-5, tres meses para el 5.2. Todo normal.
Wall Street se enfría con OpenAI y se calienta con Alphabet. El miedo cambia de bando.
La propia OpenAI admite que sus modelos pueden suponer un riesgo alto de ciberseguridad. Bombas de relojería con roadmap.
Investigación económica incómoda dentro de OpenAI: se van quienes quieren publicar lo que no conviene.
Disney firma la paz con la IA: mil millones, personajes licenciados y creatividad con condiciones.
El Pentágono adopta Gemini para ser “más letal”. Ya ni se esconden.
El Salvador se convierte en sandbox educativo de xAI: niños como betatesters, datos como activo estratégico.
La universidad pierde valor frente a la fluidez en IA. El título cuelga, el prompt manda.
Tesla Optimus se cae en público. Promesas de 25 billones, equilibrio opcional.